Estamos acostumbrados a verles cumpliendo con los actos de sus agendas oficiales y siguiendo el protocolo, sin embargo, hay algunas ocasiones en las que pueden olvidar por unos instantes sus papeles como miembros de la realeza y mostrarnos su faceta más divertida. Eso es precisamente lo que ha ocurrido este fin de semana con los príncipes heredereos de Dinamarca. Un año más, y con motivo de su viaje a Estados Unidos, Federico y Mary acudieron a la celebración del 100º aniversario de la Fundación Américo-Escandinava, una ONG en la que el país norteamericano junto con Dinamarca, Finlandia, Islandia, Noruega y Suecia colaboran para promover la cultura y la educación.
Los príncipes se convirtieron en bailarines improvisados y 'saltaron a la pista' para disfrutar al son de la música y compartir risas, gestos cómplices y palabras al oído. Mary de Dinamarca volvió a deslumbrar con el estilismo que lució en esta velada tan especial: un precioso vestido asimétrico de un tejido brillante de color gris perla de manga larga con un original detalle en el cuello y un romántico recogido bajo.
A la gala de aniversario que se celebró en el Hotel Hilton de Nueva York asisiteron 1.200 invitados, entre los que además de los príncipes Federico y Mary, se encontraban los reyes Harald y Sonia de Noruega, que eligió un llamativo diseño de color melocotón con transparencias en el cuerpo y bordados dorados, y los reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia, que acudieron acompañados de su hija menor, la princesa Magdalena, así como la presidenta de Finlandia, Tarja Halonen, y su homólogo islandés, Olafur Ragnar Grimsson.
La fundación fue creada en el año 1910 por el industrial Nis Poulsen, cuyo objetivo era fortalecer los lazos en materia de educación entre Estados Unidos y los países escandinavos. Con el paso de los años, han tenido lugar más de 30.000 intercambios de estudiantes que han participado en estos programas y han conseguido una beca para continuar con sus estudios fuera de su país.
Antes de acudir a la gala, los príncipes Federico y Mary, los reyes de Noruega y los de Suecia, visitaron el monumento a las víctimas del 11-S y presidieron un acto de homenaje en la Zona Cero por los diez años de los atentados del World Trade Center. Los herederos daneses continuarán con su visita a Estados Unidos y durante el resto de los días participarán en distintas actividades para promover empresas de su país dentro de las áreas del diseño, la moda y la gastronomía.