No sólo los trajes de alta costura cuelgan en los exclusivos guardarropas de las damas de la realeza. Entre valentinos, chaneles, guccis y pradas, reposan zaras y mangos. Ahora las marcas low cost salen del armario (regio) y dan lecciones de estilo en los compromisos de representación de reinas y princesas. Hoy estas prendas reinan con sus hermanas mayores en las citas oficiales y contribuyen con ellas a la impecable imagen pública del país de turno. No hay vestidor en palacio que no albergue vestidos, blusas, jerseys, twin-sets, faldas, trenchs o abrigos de estas populares firmas al alcance de todos los bolsillos.
Ir de tendencias con elegancia es posible sin gastarse una millonada ni recurrir a las más prestigiosas agujas como han demostrado las princesas de las principales casas reales europeas, especialmente la princesa de Asturias y la duquesa de Cambridge que visten de moda low cost sus apariciones públicas y privadas.
La esposa del príncipe Guillermo lleva a menudo ropa made in Zara: lució el día después de su boda un sencillo y favorecedor vestido azul cobalto, que combinó con blazer y plataformas en negro, y para asistir a un concierto pop en el Albert Hall de Londres, acompañada por su marido, el príncipe Guillermo, el príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles, apostó por un minivestido de la firma. Doña Letizia confía sus outfits indistintamente a Mango y a Zara siempre que tiene ocasión: se decantó por una blusa de la colección de primavera/verano 2012 de la marca catalana para uno de sus compromisos con las enfermedades raras. El último look de una larga lista de asequibles conjuntos.
También Mary de Dinamarca, Mette-Marit de Noruega y Máxima de Holanda han caído en las redes de Zara tejidas con hilo de algodón en el caso de la blusa estampada que la princesa heredera danesa lució para unos retratos oficiales con sus mellizos y de lana en el caso del abrigo camel que comparten tanto la princesa de Orange como la esposa del príncipe Haakon. Como no podía ser de otra manera, Victoria de Suecia apoya la moda sueca low cost y no han faltado durante su embarazo las prendas premamá de una de las cadenas con mayor presencia mundial, H&M. Más difícil es pillar en un renuncio a Chanel y a Gucci, la firma de la que es actualmente imagen, a Carlota Casiraghi, pero lo cierto es que en un desfile de 2007 de la maison francesa llamó la atención por su chic estilismo... de Zara. Y es que las princesas también aplican en sus compras la regla de las tres B: bueno, bonito y barato.
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