Guía de uso: Cómo llevar tiara
Hay joyas que están reservadas para acontecimientos únicos en la vida. Para el gran día, algunas novias se permiten abrir el joyero familiar y rescatar piezas tan especiales como las tiaras. Y, aunque cada vez se ven menos, algunas de las novias más sofisticadas siguen apostando por incorporar este complemento royal a su look
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Es cierto que, fuera de la aristocracia y del universo royal, es raro encontrarse con novias que elijan llevar un accesorio tan distinguido como es la tiara. Al tratarse de una joya de origen real, puede provocar reparo y no muchas se atreven a llevarla. Sin embargo, este complemento es una joya más –un poco más especial, eso sí– con la que pueden jugar las novias a la hora de complementar su vestido y terminar de pulir su look nupcial, aportando un toque de elegancia y sofisticación instantáneo.
En su origen, esta diadema se solía llevar con el cabello recogido y combinada con el velo. No obstante, en la actualidad también podemos verla en peinados de coleta baja, cabello suelto, media melena recogida... y, lejos de los diseños realizados en oro, platino y piedras preciosas, llevados por la auténtica realeza, hoy en día podemos encontrar gran variedad de opciones, realizadas en distintos materiales y que encajan en todo tipo de presupuestos. El resultado es el mismo: un aire royal de lo más chic. Analizamos en estas páginas distintos estilos de tiara llevados por algunas de las novias más icónicas de los últimos tiempos. Ellas son nuestra mejor inspiración.
En clave geométrica
- Menos es más
Las tiaras sencillas de filigrana, como el diseño bandeau de diamantes de Meghan Markle, que perteneció a la reina Mary, aportan un toque de sofisticación inmediato. Son ideales para las novias que buscan una elegancia minimal y sin excesos.
- Un plus de color
Si quieres añadir un extra, puedes optar por diseños congemas de color, como la tiara con esmeraldas que llevó la princesa Eugenia de York, una joya creada por Boucheron, en 1919, para la dama de la alta sociedad británica Margaret Greville, y que en 1942 terminaría heredando Isabel II.
Geométricas, art déco, con motivos florales... hay una tiara para cada estilo. elige la que más se adapte a tu personalidad y dale a tu look un aire royal
De inspiración floral
- Sí, a los ornamentos
Algunas novias, cuando deciden incorporar una tiara a su conjunto nupcial, se lanzan de lleno con el total look princesa, eligiendo diademas de gran tamaño y realizadas a base de elaborados ornamentos, como motivos botánicos. Tatiana Blatnik dio el “sí, quiero” con una pieza perteneciente a la Familia Real griega, la tiara del Corsario y que ya lució Marie-Chantal en su boda, en 1995.
- ¿Y qué hay del velo?
Además de estéticas, las tiaras son el soporte perfecto para incorporar largos velos. Las royals más chic eligen diseños vaporosos, creando un contraste perfecto. Es el caso de Alessandra de Osma, que combinó su velo con una diadema floral de oro y diamantes, originalmente realizada para la emperatriz Josefina de Francia, y que ahora pertenece a la Casa de Hannover.
Las magníficas tiaras que llevaron las ‘royals’ en sus bodas: de la princesa de Gales a doña Letizia
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