Son cuatro angelotes de enormes ojos curiosos que miran todo lo que tienen alrededor con ansias de conocimiento. Y es que para los bebés todo es nuevo y apenas están descubriendo las posibilidades que les ofrece su entorno. Un paseo en brazos de mamá es el mejor plan para una tarde de verano y más cuando estas se desviven por el pequeño. Caricias, arrumacos, susurros al oído, que te quito la nariz… los juegos y la complicidad entre madre e hijo es constante y es que ellos son los auténticos “reyes de la casa”.
Tennesse es el bebé de Reese Witherspoon y Jim Coth, tiene nueve meses y es un precioso bebé de pelo rubio y ojos claros. Es el tercer hijo de Reese, que tuvo a Ava, de 14 años, y Deacon, de 10, con su primer marido Ryan Phillippe. Sin embargo, Tennesse centra ahora sus atenciones y las de sus hermanos, claro, y se ha convertido en el juguete de la familia.
Un año y medio tiene Luca, hijo de Hilary Duff y Mike Comrie. No es fácil ver a la cantante sin su niño en brazos, ya que desde que se convirtió en mamá no se ha separado de él. “Echo de menos su carita cuando no estoy con él” escribía la artista en Twitter poco después del nacimiento del pequeño.
Se ha hecho un hueco cada vez más grande en la vida de sus padres y también en sus redes sociales. Milan, hijo de Shakira y Piqué, sabe lo que es ser el centro de atención allá por donde va y parece que no lo lleva mal (aunque de vez en cuando se lleva algún disgusto ante tanta expectación y se echa a llorar). Sus enormes ojos oscuros y su pelo negro hacen que den ganas de comérselo a besos… eso es lo que hace su mamá siempre que tiene ocasión. ¿Les extraña?
Ya tiene dos añazos y es todo un hombrecito. Aleph es el retoño de Natalie Portman y Benjamin Millepied, por cuyas venas corre un gran talento. Ella actriz, él bailarín… aún es pronto para saber si el niño heredará algunas de sus cualidades, de momento parece que le encantan las caramelos. Y es que ser hijo de un famoso no evita que sigan siendo niños al fin y al cabo.
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