Antes de comenzar una extensa gira por Asia, el artista español más internacional, Julio Iglesias, descansó en familia. La estrella pasó las vacaciones de Semana Santa en su residencia de Punta Cana, República Dominicana, junto a su mujer Miranda y sus hijos, unos días en los que aprovechó para relajarse antes de afrontar un intenso programa de conciertos que arranca el próximo 14 de abril en China. Sin duda ha sido una temporada en la que la compañía de sus hijos y el paradisiaco entorno le ayudó a dejar a un lado el trabajo para dedicarse a lo más importante de su vida. Y es que, tal y como confesó días después en el citado país asiático, “les ama más que a sí mismo”.
La estrella mundial les llevará consigo en su gira por Asia, en la que quiere que “los pequeños estudien mandarín”, para lo que viajará con ellos una profesora de chino. Julio Iglesias, leyenda viva y uno de los diez primeros artistas que más discos han vendido en el mundo, recibió en Pekín dos galardones históricos: el del primer y más popular artista internacional de todos los tiempos en China, que le entregó el pianista chino Lang Lang, internacionalmente famoso y el más influyente artista joven del mundo, y el del récord mundial Guinness por ser el artista latino que más discos ha vendido en el mundo, que le fue entregado por Rowan Simons, “chief executive officer” de “Guinness World Records” en China, Taiwán y Hong Kong.
En honor a su impresionante carrera musical, plagada de éxitos incomparables, con canciones que son número uno mundial, grabadas en un número récord de idiomas, Julio Iglesias ha recibido estos dos galardones, tanto por parte de Sony Music Entertainment como por parte de “Guinness World Records”. “Es uno de los momentos más emotivos de mi carrera —comentó Julio entusiasmado tras recibir los premios—. La primera vez que estuve en China fue en 1971. Me lo imaginaba como un gran país, lleno de sentimiento, y a lo largo de los años siempre he pensado que China es increíble. Este premio me lo dado un país que ha estado en mi corazón durante décadas. ¡Muchísimas gracias! ¡Gracias, China!” comentó.
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