Ainhoa Arteta y Jesús Garmendia no podían disimular la felicidad que ha supuesto para ambos el nacimiento de su primer hijo en común, Íker. El pequeño vino al mundo el pasado miércoles en la Clínica del Pilar, en Barcelona y pesó 3,280 kilos . La pareja ya se encuentra en casa con el bebé y seguramente con Sarah, la hija que Ainhoa Arteta tiene con el barítono Dwayne Croft, de quien se separó hace seis años.
El pequeño Íker aguantó con paciencia el aluvión de flashes de los periodistas, que se congregaron para inmortalizar el momento de la salida de la clínica rumbo a su nueva vida.
Tanto Jesús como Ainhoa están disfrutando de una de sus mejores etapas y son un ejemplo de estabilidad, desde que iniciaron su relación hace cuatro años. El jinete ha conseguido que su novia olvide la dura separación del que fue su anterior marido y si todo salen como planean, podrían contraer matrimonio en los próximos meses.
Aunque celosa de su vida privada, la cantante reconocía: "Soy tremendamente romántica. La vida sin amor no es posible. No sólo el amor de pareja. Sin amor nada es posible. Si falta, entonces pasan cosas horribles”.
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