El vestido de Irina, en la pasarela

l diseño de flores que ha llevado la modelo en las últimas semanas es similar a este perteneciente a la colección de Primavera/verano 2017 de Alexander Terekhov, un modisto ruso que ha vestido, entre otras, a Adriana Lima y Lena Perminova.

El largo midi

Tras las minifaldas y los vestidos cortos del verano, la bajada de los termómetros invita a bajar también unos centímetros el largo de la falda. Desde la rodilla al tobillo, el vestido midi ofrece opciones para todos los gustos.

Vestido Carina, de Reformation (209€).

Inspiración vintage

Las mangas abullonadas, el estampado y el corte 'wrap' consiguen la dosis exacta de vintage.

Vestido azul, de Réalisation Par (176€).

Desde París

El vestido perfecto para los últimos días de verano es sencillo, cómodo y muy versátil, tres requisitos que también cumple el vestidor de cualquier parisina.

Vestido 'navy' Gabin, de Rouje (170€).

Escote Bardot

De tonos similares al vestido de Irina Shay, este modelo camisero añade una de las tendencias más exitosas del verano: los hombros descubiertos gracias a su escote Bardot.

Vestido fluido, de Uterqüe (150€).

En rojo y abotonado

El rojo es el color que más favorece a todas las mujeres, así que, sumado a la silueta abotonada, este diseño 'made in France' podría ser el vestido ideal para cualquiera.

Vestido Laura, de Rouje (130€).

El verano puede ser eterno

El azul celeste de esta propuesta con mangas fruncidas resaltará el bronceado de la piel.

Vestido celeste, de Massimo Dutti (129€).

Flores de todos los colores

El estampado primaveral por excelencia supera sus barreras este año: el de 2017 será el otoño de las flores.

Vestido de flores, de Zara (29,95€).

Una boda en septiembre

Irina lo ha lucido unos meses después de dar a luz, pero el corte de este tipo de vestidos hace que sean perfectos para un look de invitada premamá. 

Vestido nude, de Asos Maternity (27,49€).