Skip to main contentSkip to footer
netherlands royal© GettyImages

Se cumplen 10 años de la coronación de Guillermo y Máxima de Holanda: los mejores momentos de un día histórico

Príncipes y princesas de todo el mundo se reunieron en Ámsterdam


30 de abril de 2023 - 10:01 CEST

Hoy es un día muy especial para Máxima y Guillermo de Holanda. Se cumple una década desde que llegaron al trono en un emocionante acontecimiento que reunió a príncipes y princesas de todo el mundo -entre ellos, los entonces Príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia-. Y del que, sobre todo, aún se recuerda la emoción de Beatriz de los Países Bajos, quien abdicaba en su hijo, dando así paso a una nueva generación, y garantizando el relevo en el trono.

La Reina que llegó de Buenos Aires

De la corona de plástico y el vals imposible con un príncipe azul imaginario en su Buenos Aires natal, al cante y baile de una sevillana en la Feria de Abril con el hombre llamado a ser el primer Rey de Holanda en ciento veintitrés años. De brillante profesional en Nueva York, a joven novia real en el palacio de la Haya; de ser tú, a Alteza Real, y de Alteza Real, a Su Majestad.

Sin duda, un excepcional destino para Máxima, que entraba en la historia de las Reinas de Holanda con todos los honores y del brazo de su marido, el nuevo soberano de los Países Bajos. La época del tutelaje había llegado a su fin. El Parlamento lo confirmó oficialmente el 13 de mayo de 2011. La princesa de Orange sería Reina desde el mismo momento en el que Guillermo accediera al Trono. De nada sirvió que diferentes formaciones políticas se posicionaran en contra alegando que debía mantenerse la tradición monárquica —los consortes de las Reinas de los Países Bajos fueron príncipes y no Reyes—. No era la opinión de la mayoría y no prosperó.

Amalia hizo historia

Por primera vez en la Historia —el título se reservaba para los herederos varones hasta que, en 1983, se hizo un cambio en la Constitución—, y de conformidad con el artículo 7 de la adhesión a la Ley de la Casa Real, el Reino tenía una princesa de Orange.

A sus nueve años —cumpliría diez en diciembre—, era consciente de su papel y también de que no asumiría ninguna responsabilidad hasta su mayoría de edad. Amalia cambiaba de estatus, pero no de vida, ya que sus padres estuvieron decididos a protegerla hasta que entrase en el Consejo de Estado.

Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola
Máxima de Holanda HOLA PLUS© Hola