PULSE SOBRE LA IMAGEN PARA VER MÁS FOTOGRAFÍAS
Luis Alfonso de Borbón, que participó durante estos días en la competición de polo en Sotogrande con su equipo ‘Bisontes Santander’, fue subcampeón en un reñido partido frente al ‘Silex’, en la final de la Copa de Bronce de bajo handicap. Durante la final del torneo de polo de bajo hándicap, el duque de Anjou tuvo a unos animadores muy especiales. Su mujer, Margarita Vargas, y sus tres hijos, que se lo pasaron en grande. Muy emocionante estuvo el final del partido y tanto Margarita Vargas como su hija, Eugenia, y los mellizos, Luis y Alfonso, siguieron desde bien cerca todos y cada uno de los movimientos de Luis Alfonso y lo animaron tanto con su presencia, como en cada uno de los descansos de cada partido. Luis Alfonso de Borbón, tras pitar el árbitro el final de uno de los tiempos del partido, se acercó para ver cómo se encontraba su familia.
El Duque de Anjou tuvo ocasión de participar en esta edición en la cancha de Puente de Hierro en el Club de Polo de Sotogrande, mientras Margarita estaba pendiente de los más pequeños, que con tan solo dos años no paraban de ir de acá para allá y de querer jugar con todo. Jugaron con los tacos de polo, los ordenaron, e incluso sentados en el césped junto a su hermana pudieron ver desde la primera línea los buenos resultados que cosechó el equipo de su padre al principio del partido, aunque después fuera derrotado por el equipo contrario. Y es que los tres son la auténtica debilidad de Luis Alfonso, quien reía a carcajadas con las ocurrencias de sus hijos. Tanto es así, que Eugenia de Borbón Vargas, por su manejo con la indumentaria del polo (tacos de polo, la bola -la bocha en el argot argentino-), promete ser una buena jugadora de polo al igual que sus hermanos.
El duque de Anjou y su familia han elegido por tercer año consecutivo la exclusiva urbanización de la localidad gaditana de Sotogrande para disfrutar de sus vacaciones, relajarse en la playa bajo el sol de Cádiz y también disfrutar de una de sus aficiones preferidas, el polo. Allí, como una familia numerosa que son, se han encargado personalmente de sus tres niños y es que Luis Alfonso de Borbón es todo un padrazo y se desvive por ellos y en alguna ocasión se convierte en un niño más como ellos.
María Margarita le acompañó en la final y disfrutó del escenario y las vistas de las canchas de polo de Sotogrande, al igual que pudo contemplar cómo disfrutaron sus pequeños en el césped, paseando a su perrita, Lola, o practicando como si fueran jugadores de polo e incluso pudimos ver a Margarita charlar con sus amigas. Pero cuando se reúne con su marido, el duque de Anjou, en sus miradas, y en sus gestos se revela que están más enamorados que nunca.