María Sharapova ha demostrado que tiene un gran sentido del humor. A pesar de que el tenista Novak Djokovic se ha hecho más popular por su imitación de la bella tenista rusa que por haberse proclamado finalista en el Abierto de Estados Unidos, ella ha aprovechado esta circunstancia para empezar una amistad que está dando mucho que hablar.
María acompañó a los padres de Djokovic en la final del Abierto de Estados Unidos en la que el serbio se enfrentó a Roger Federer y eso que los gestos con los que parodió a María no eran para ganarse su amistad eterna.
Quizás para limar asperezas, Djokovic invitó a la tenista más deseada del circuito para que estuviera en la final y ella aceptó la invitación encantada. Tras el partido, y a pesar de no haber ganado, Novak comentó: "Fue un gesto muy bonito por su parte que viniera a apoyarme, como también lo hizo Robert de Niro". Una vez acabadas con posibles suspicacias de María, quiso acabar también con las habladurías que le relacionaban con la rusa: "No vayáis mucho más allá entre María y yo. Lo que tenemos es sólo una amistad".
Novak sacó de dudas a quiénes se preguntaban cómo se había tomado María la broma: "Dijo que iba a matarme" . Al final, el serbio se siente feliz por el éxito cosechado en el Abierto de Estados Unidos y por la fama recién adquirida fuera de las canchas: "Estoy muy contento por los éxitos dentro y fuera de la pista".