Un cincuenta cumpleaños es una de esas ocasiones que hay que celebrar por todo lo alto, si además tenemos en cuenta que ha pasado por un año un tanto complicado. Demi Moore llega a esta fecha tratando de dejar atrás los problemas que le han complicado los últimos meses. La artista decidió alejarse de todo y se regaló un viaje de ensueño a Abu Dhabi, donde se relajó en una de las hamacas del club Monte Carlo Beach acompañada de algunos amigos, entre los que se encontraba el florista Eric Buterbaugh. A la hora del almuerzo, una buena copa de champán y algo de marisco sirvieron para brindar por su aniversario en privado.
Pero la fiesta no terminó ahí. Demi puso rumbo a la India, concretamente a Jodhpur, donde la casualidad quiso que celebrara otro cincuenta cumpleaños. Naomi Campbell organizó una lujosa reunión para felicitar a su novio, el millonario ruso Vladislav Doronin, a la que acudieron unas 200 personas, entre las que estaba Kate Moss. Fueron dos días de encuentros y eventos, en los que la estrella de la gran pantalla brilló como sólo ella sabe. Vestida con un tradicional "ghagra choli", creación de la Manis Malhotra, en tonos crema, verde y con detalles de un intenso color morado, estaba deslumbrante. Al finalizar la cita, puso rumbo a Dubai.
Demi encara esta nueva década con buen ánimo, tal y como aseguran algunas fuentes cercanas a ella. “Está muy guapa y se siente bien después de un año realmente duro. No está triste por cumplir cincuenta años”. Y es que el fin de su matrimonio con el también actor Ashton Kutcher supuso un duro golpe para ella y la sumió en la tristeza. Un estado que la llevó a distanciarse de sus hijas y a ingresar en un centro tras sufrir una crisis emocional. Sin embargo, poco a poco parece que va recuperando su vida (ha habido un acercamiento con su hija mayor Rumer) y, sobre todo lo que más falta le hacía, las ganas de sonreir.