Su ausencia en la presentación del trailer del musical Nine hizo saltar las alarmas pero afortunadamente todo quedó en un susto. Horas después de sentirse indispuesta a causa de la gripe y no, como en un principio se dijo, de una intoxicación, Penélope Cruz hizo su aparición estelar en la fiesta benéfica Hollywood Domino en Cannes. Bajo el lema A night for Hollywood Domino Party, la velada contó con un buen número de invitados de excepción, entre ellos dos bellezas españolas, Penélope Cruz y Elsa Pataky. Penélope se enfundó en un Chanel vintage de color marfil con una chaqueta tipo esmoquin del mismo color, mientras que la novia de Adrien Brody también vistió de blanco con un diseño palabra de honor.
Penélope Cruz se perdió la presentación del musical Nine, que tuvo lugar ayer en el festival. El productor de Nine Harvey Weinstein fue el encargado de informar a los medios sobre el malestar de la actriz. “Mañana por la noche es el estreno de su película. Ella mejora y ahora mismo está bajo el cuidado de un doctor”, apuntó Weinstein. Sin embargo, después de horas de reposo, Penélope se sintió mejor y no quiso perderse la fiesta Hollywood Domino. La actriz ha tenido que desmentir, por otra parte, los rumores respecto a que estuvo aquejada por la gripe A. "Tuve una gripe, una gripe normal, pero una gripe normal puede hacer que te sientas muy mal", explicó.
Hoy, a primera hora de la mañana, la ganadora de un Oscar por Vicky Cristina Barcelona se ha dejado ver por el Palacio de Festivales junto a Pedro Almodóvar en la presentación de Los abrazos rotos, filme que opta a llevarse La Palma de Oro, y que ha sido aplaudido por la crítica. Entre gritos y ovaciones, la española, que lució en esta ocasión un vestido color crema a juego con unos zapatos de Christian Louboutin y joyas de Chopard, posó para los fotógrafos y dio muestras de estar recuperada de su malestar.
La película, protagonizada por Penélope Cruz y Lluís Homar, es la primera cinta española presentada a concurso este año - ya que Ágora,de Alejandro Amenábar está fuera de competición- y el viernes será proyectada Mapas de los sonidos de Tokyo, de Isabel Coixet. Tres años después de haber recibido el premio al mejor guión por Volver y diez años después del premio al mejor director por Todo sobre mi madre, Almodóvar luchará con Los abrazos rotos por conseguir el máximo galardón del certamen, un premio que hasta ahora sólo ha conseguido un español Luis Buñuel con Viridiana.
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