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Rania de Jordania, considerada una de las reinas más elegantes del mundo (y muchos dirán que la más bella), nació en Kuwait como Rania Al-Yassin y allí permaneció hasta que completó sus estudios de segunda enseñanza, sin imaginar por aquel momento que acabaría convirtiéndose en una una figura tan destacada tanto en Jordania como internacionalmente, destacando su compromiso con las causas humanitarias y su gran dedicacion a la corona.
Sus padres
Sus padres jordanos de origen palestino quería que su hija conociera la situación de su país, de su cultura, de sus gentes. Por eso, Rania no se marchó a Estados Unidos o Gran Bretaña, como tantas otras jóvenes árabes de buena familia, sino que completó sus estudios superiores en la Universidad Americana de El Cairo. Su padre, Faisal Yassin era un médico originario de Tulkarem, en el norte de Cisjordania y bajo ocupación israelí y su madre, Ilham Yassin siempre ha sido uno de sus mejores apoyos. Además tiene dos hermanos: un hermano un año menor, Majdi y una hermana tres años mayor, Dina.
Estudios
Con la licenciatura en Administración de Empresas por esta Universidad, la bellísima Rania, se traslada a Ammán, capital del Reino hachemita, para trabajar en una multinacional. Entonces no podía imaginar el destino que le esperaba en aquella ciudad exótica y desconocida en el corazón de Oriente Medio. Pocos meses después de su llegada a la capital jordana, en el verano de 1992, asistió a una cena en la que conoció al príncipe Abdalá bin Al Hussein, hijo mayor del entonces Rey Hussein I.
Su boda con el futuro rey Abdalá II
Tras un año de noviazgo, la pareja decidió casarse. El 10 de junio de, fecha del enlace, Abdalá no era príncipe heredero, sino su tío, el príncipe Hasan. Sin embargo, cuando el rey Hussein se sintió morir nombró a su primogénito príncipe heredero, título que había perdido en 1965 en favor de su tío.
Así, tras la sentida muerte del rey de los jordanos, el 7 de febrero de 1999 después de varios años luchando contra un cáncer, su hijo Abdalá juró como soberano ante las dos cámaras del Parlamento. El 9 de junio fue coronado rey de Jordania, bajo el título de rey Abdalá II. Entonces, el nuevo soberano y Rania ya tenían dos hijos: Hussein, nacido el 28 de junio de 1994, e Iman, el 27 de septiembre de 1996.
Rania, Muna Al Hussein y la reina Noor
En el mismo acto, el rey concedió a su esposa la Medalla de Hussein ben Alí. Tres meses antes había emitido un real decreto por el que se concedía a su esposa el título de Reina, a pesar de que la cuarta esposa de su padre, Noor Al-Hussein, ostenta el título de Su Majestad la reina Noor de Jordania. Sin ese gesto tan importante, Rania solo habría ostentado el título de princesa consorte, al igual que su suegra, la princesa Muna Al Hussein. En 2004, el monarca le otorgó el rango honorario de coronel de las Fuerzas Armadas. Otro gesto que evidencia la importancia de Rania dentro del Reino hachemita.
Una mujer poderosa: así es su trabajo
Según la revista Forbes, es una de las cien mujeres más poderosas del mundo. Y es que durante el reinado de su marido no solo se ha dedicado a formar una familia numerosa, unida y feliz (en el año 2000 nació su tercera hija, la princesa Salma, y en 2005, el príncipe Hashem), sino que también ha trabajado muy duro en dos campos: el de la infancia y la educación y el de la igualdad entre niñas y niños.
Rania se ha convertido en la mejor embajadora de su país y en imagen de la mujer moderna en Oriente Medio. Es una de las pocas líderes mujeres que participan en el Foro Económico Mundial de Davos, en el que suele abordar el asunto de la igualdad, entre otras cuestiones.
La Reina de las redes sociales
Constantemente lanza mensajes de tolerancia, compasión y construcción de puentes entre las diferentes culturas y religiones, una cuestión clave y espinosa en Oriente Medio. Y, por si fuera poco, también reina en las redes sociales. Fue pionera en el uso de las nuevas plataformas para dar visibilidad a sus proyectos y mensajes y ahora tiene una legión de "súbditos" virtuales. Cuenta con más de diez millones de seguidores en Twitter y algunos más en Instagram, y con decenas de miles seguidores en Facebook y YouTube.
Apasionada de la moda
Seguidora de las últimas tendencias, a la esposa del Rey Abdalá II de Jordania le fascina la moda y además de haberse convertido en todo un referente como soberana es considerada una de las mujeres más elegantes del mundo. "La moda es un modo de expresarme creativamente. Siempre me gustaron los trajes y me divierto con ello" ha declarado la Reina.
En los grandes acontecimientos oficiales podemos verla con vestidos largos con los que destaca su cintura o sus atléticos hombros. También hay una Rania más moderna y juvenil que se atreve con diseños de cortes asimétricos, con drapeados y grandes lazos. Entre sus diseñadores favoritos se encuentran el libanés Elie Saab y Giorgio Armani. Es fiel a los zapatos de salón y parca en cuanto al uso de joyas. Su llamativa melena y su belleza racial son sus mejores armas.