Pero la pareja, antes de fundar su propia marca, se trasladó a vivir a Brasil, donde ambos se dedicaron a diversos trabajos relacionados con la moda. Fue en 1993, a su vuelta a Londres, cuando formaron el tandem Clements Ribeiro, que deslumbró a la crítica con su primera colección, muy femenina pero poco convencional.
Desde entonces no han hecho más que obtener galardones y reconocimientos, tanto es así, que la solvente marca Cacharel les fichó en el año 2000 para que se ocuparan de dirigir el diseño de la casa, que desde entonces no ha hecho más que aumentar sus ventas.