Es tiempo de flequillos. Más o menos definidos y adaptados al estilo personal, pero flequillos que marquen un antes y un después en tu melena. Sin duda, el rey de la temporada según alega Beatriz Mora, de Art Lab, "es uno alargado, a la altura de los ojos, y en progresión hacia los extremos para dejarlo un poco abierto de manera casual". Llevar flequillo, "siempre potenciará las facciones y profundizará nuestra mirada", afirma Beatriz. Sin importar demasiado por cuál te decantas, los estilos extremos son los protagonistas. "Bien sea largo con textura, inspirado en la década de los 70, creando un aspecto desaliñado", expone Xavi García, director creativo de Salon44, o "cortos y muy gráficos por encima de la ceja, dando fuerza a la mirada con un aire infantil", sugiere.
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¿Cuál te va bien según tu rostro?
Dependiendo del tipo de rostro, sentará mejor un estilo que otro y aunque algunos parezcan sencillos de realizar, debemos tener cuidado a la hora de coger unas tijeras y dar rienda suelta a la mano, sobre todo si se trata de hacer un flequillo ultracorto y muy recto, ya que es un corte que requiere de la destreza y precisión de un profesional. "A los rostros más redondos les favorece todo aquello que dé movimiento y marque el final de los mechones", aclara Eduardo Sánchez, director de Maison Eduardo Sánchez. "A las facciones angulosas, del tipo Kendal Jenner, no le sientan bien los que son demasiado cuadrados ni las líneas rectas. Les favorecen los flequillos de capas muy largas, que vayan desde debajo de las cejas incluso hasta casi la mandíbula". Por último, Eduardo Sánchez recomienda, si tienes el rostro ovalado, "ajustar el tipo de flequillo a la textura del cabello. Más recto en caso de pelo muy listo y más decapado en el pelo con cuerpo”.
Además, según el toque que le quieras dar, éste se puede llevar "hacia delante, para definir la imagen y hacer de él una seña de identidad, o hacia un lado, para conseguir una imagen más suave", explica Xavi.
Otra de las tendencias para este invierno, con aire desenfadado, apunta Beatriz Mora, "es el cabello rizado acompañado de un flequillo con densidad y longitud suficiente para dejarlo caer en textura natural". Un estilo Shag muy capeado y sexy cuyas versiones se disparan.
Melenas por la clavícula o cabellos cortos son dos tendencias que van en cabeza actualmente y que se complementan muy bien con flequillos que enmarquen el rostro. Lo importante, resalta el director creativo de Salon44, "es llevar el cabello con textura y aspecto cuidadosamente desaliñado, que ofrece una imagen casual que resulta muy sexy".
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