Lo has intentado de mil y una maneras, pero no has conseguido acabar con esos antiestéticos granitos que te salen a veces en las piernas. Y que, precisamente ahora, salen a la luz, cuando has sacado ya la ropa de verano.
La aparición de estos granitos es muy común, y aunque parezcan de acné, no lo son, están provocados por el crecimiento del vello. A menudo, el pelo es demasiado débil como para traspasar la barrera de la piel y salir hacia el exterior, por lo que, mientras crece, se va produciendo un “atasco” que se manifiesta en forma de granitos, que son el resultado de esos pelitos enquistados. Hemos hablado con el doctor José Luis López Estebaranz, asesor dermatológico de L’Oréal Paris y director de la clínica Dermomedic, sobre este problema.
-¿Por qué se produce este problema?
Son pequeñas lesiones inflamatorias (pseudofoliculitis) que aparecen al enquistarse el folículo piloso en su camino de salida a través de la piel .
-¿Hay un tipo de piel más propensa a sufrir este problema?
Puede ocurrir en cualquier tipo de piel. Las personas atópicas son más propensas, pero también existen factores genéticos y raciales que predisponen a este problema (es más frecuente en la raza de color).
-¿Qué solución hay para acabar con este antiestético problema?
Hay que evitar depilarse con métodos que extraigan la raíz del bulbo piloso. Es preferible rasurarse que usar otros métodos depilatorios. Si aparecen lesiones inflamatorias deben aplicarse antibióticos locales o antisépticos.
-¿La exfoliación es una buena solución?
En pieles con queratosis o muy secas un tratamiento con emolientes y queratolíticos que exfolien la piel de forma adecuada puede ayudar a disminuir las lesiones en estas personas.
-¿Cuál es el método de depilación más recomendable en este caso?
Los métodos de depilación permanentes con láser y luz pulsada son métodos que pueden ayudar a eliminar el problema de forma definitiva.
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