Cuando la americana Molly Guy uso como inspiración para su traje de novia el que había llevado la hermana de Sienna Miller, Savannah, no pensó que años más tarde estaría diseñando con ella una colección conjunta. Una historia de casualidades, gracias a las redes sociales o al destino, que supone el resurgir de la hermana de la actriz tras su depresión y los problemas económicos vividos.
Fue en septiembre del año 2005 cuando la diseñadora Savannah Miller se casaba con el carpintero Nic Skinner, en una pequeña capilla en los jardines de la mansión del siglo XIX Buckland cerca de Bideford, en Devon. De lejos, las cámaras pudieron captar a una novia con un tocado floral cubierto con una capa con capucha y un vestido tipo caftán de franela de algodón. Aunque Sienna Miller –que acudió fiel al estilo que le ha coronado como una de las it girl británicas por excelencia- fue la que acaparó la mayoría de los flashes debido a que su relación con Jude Law atravesaba un bache, una bucólica fotografía de la pareja paseando con niños por la campiña inglesa se quedaría para siempre.
Sienna Miller, feliz en la boda hippy de su hermana Savannah
Como muchas novias, Molly Guy rebuscó en internet a la caza de inspiración para su vestido de novia y así fue como se enamoró de este vestido, guardó la imagen y tras casarse se inspiró en ella para lanzar su firma de trajes de novia, Stone Fox Bride. La casualidad, las redes sociales o el destino hicieron el resto cuando la estadounidense colgó en su cuenta de Instagram la foto de la boda de Savannah, y al poco tiempo ambas diseñadoras estaban hablando de hacer una colección conjunta, que ya ha salido a la luz con la bisnieta del célebre escritor, Dree Hemingway, como modelo.
Por otro lado, este lanzamiento parece el resurgir definitivo de la hermana de la actriz en el mundo de la moda, ya que durante el verano del 2014 Savannah reveló haber atravesado algunos problemas. Tras haber triunfado junto a la actriz con la firma Twenty8 Twelve y haber saboreado las miles del éxito internacional, la diseñadora sufrió una depresión post-parto que le llevó a tener problemas económicos, así que optó por dejarlo todo y emprender una nueva vida.
Tras vender su casa en Gloucestershire –que según ella “era demasiado cara de mantener" y "vivían por encima de sus posibilidades"- la familia se trasladó a Panamá “para vivir una vida loca en la selva”, en donde su marido emprendió negocios en el sector del turismo. Al año la familia regresó a Inglaterra y el pasado mes de septiembre presentó su nueva línea de ropa en Londres, a la que ahora se suma esta colección para novias.
En los últimos años han sido muchas novias británicas, como Kate Moss o Poppy Delvingne, las que han inspirado a mujeres de todo el mundo para conseguir ese aire bohemio, romántico y de campiña inglesa en su gran día, solo que ahora Savannah Miller da un paso más allá y como parte de esa "armada" del estilo british del que su hermana Sienna es una habitual parece dispuesta a conquistar a las novias de espíritu libre.
