Maribel Verdú, una de las más prolíficas actrices del cine y el teatro español de los últimos años vive un gran momento en su vida profesional. Tras una larga temporada cosechando grandes éxitos en los escenarios teatrales de toda España representando obras como Un Dios salvaje, Hélade o Los hijos de Kennedy, la actriz parece haber vuelto con más fuerza que nunca al panorama cinematográfico empalmando un proyecto tras otro.
A primeros del mes de diciembre la actriz madrileña finalizó su última película, La punta del iceberg, en la que interpreta el personaje de una investigadora de una multinacional encargada de averiguar por qué tres empleados decidieron suicidarse, junto a Carmelo Gómez y Bárbara Goenaga. Tras unos días de descanso junto a su marido, el productor Pedro Larrañaga, en la casa que la pareja tiene en el sur de España y disfrutar de una entrañable Nochebuena con la familia, la actriz comienza un nuevo proyecto que le obligó a viajar al otro lado del charco justo antes de poder festejar la Nochevieja, pero con la ilusión y la emoción que siempre le provoca comenzar un nuevo rodaje.
Argentina ha sido el lugar elegido por la actriz para comenzar 2015, un país al que Maribel considera como su “segunda casa” desde que viajó por primera vez en 1998 para filmar Frontera sur, de la mano de Gerardo Herrero, y donde es una actriz ya consagrada. De hecho allí ha protagonizado varias películas como Tetro, que rodó bajo las órdenes de Francis Ford Coppola y que supuso su primer rodaje en inglés, o El niño de barro junto a Daniel Freire, que le han catapultado a la fama en el “país del tango”.
En esta ocasión se trata de Sin hijos una comedia romántica dirigida por Ariel Winograd, en la que comparte protagonismo con el actor argentino Diego Paretti, conocido en nuestro país por su participación en Maktub de Plácido Arango, y que le mantendrá en Argentina durante los dos meses que está previsto dure el rodaje.
La película narra, curiosamente, las vicisitudes de una pareja que no tiene hijos, una situación que la actriz vive en la vida real. La actriz, casada desde 1999 con Pedro Larrañaga, ha manifestado en alguna ocasión que no quiere ser madre "ni en un futuro cercano, ni a largo plazo" y que se trata de “una elección premeditada y consensuada”. Veremos si esa es también la elección de la pareja protagonista de Sin hijos o en la nueva película de Maribel el argumento transcurre por otros derroteros.
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